El Nuevo Livro do Desassossego de Jerónimo Pizarro |
Nuevo capítulo en la historia del Livro do Desassossego de Fernando Pessoa. La editorial Tinta-da-china publicó en 2013, en Rio de Janeiro y en Lisboa, una nueva edición de Jerónimo Pizarro de la obra inacabada del escritor portugués. Desde que viese la luz en 1982, el Livro ha contado, si tenemos en cuenta el trabajo de los cuatro especialistas principales, 6 reencarnaciones: una de Jacinto do Prado Coelho, tres de Teresa Sobral Cunha, una de Richard Zenith y una de Jerónimo Pizarro, si aceptamos que las ediciones de estos últimos, 10 y dos respectivamente, son un mismo libro con variaciones. Si no, estaríamos hablando de más de 15 obras diferentes. Basta acercarse al legado del escritor para comprender la proliferación de manifestaciones en forma de libro que cada editor prepara.
En el III Colóquio Internacional Fernando Pessoa, Jerónimo Pizarro llegó a afirmar que a día de hoy no podía defender una edición del Livro do Desassossego sobre las otras. Como es bien sabido, el carácter combinatorio del Livro inacabado de Pessoa (sin entrar a analizar la posible intencionalidad de ese hecho) impele a que cada lector y, por ende, cada editor e investigador organice su propio Livro. Motivo por el cual es discutible canonizar cualquiera de las ediciones. En dicho coloquio, Pizarro esgrimió como ejemplo algunas de las diferencias entre sus dos ediciones para resaltar que no existía un libro definitivo. El posicionamiento de Pizarro se reafirmó, poco después, tras sostener, en la Universidad de Coimbra, en una comunicación titulada “A Ansiedade da Unidade: Uma Teoria da Edição”, que el Livro do Desassossego debe su existencia también, más allá de los fragmentos encontrados en el arca, a todos los agentes y procesos sociales que intervinieron en cada una de sus ediciones (Pizarro, 2013). Así, algunos de los cambios que Pizarro incorporó en su nueva edición vinieron sugeridos por su propia reflexión y por esos procesos sociales que el especialista menciona, como, por ejemplo, las valoraciones críticas, decisiones editoriales, etc. Cuando comparamos las dos ediciones, ¿se puede hablar de cambios sustantivos? ¿Hasta qué punto estamos ante obras diferentes? ¿Los criterios de interpretación o edición de una invalidan la otra?
Vayamos por partes. Uno de los puntos que suscita más polémica en la edición de 2010 se centra en el papel del editor y de las funciones de crítico. De tal modo, se plantea una tricotomía entre tipos de edición e interpretación. Bajo este prisma, por un lado tenemos las ediciones de Prado Coelho y de Zenith que presentan al lector una obra más unitaria. Principalmente, por lo que se refiere a la ordenación de los fragmentos, tras seguir, cada editor, un determinado criterio semántico de interpretación que daría sentido a cada libro (Giménez, 2013a). La función de estos editores como críticos condiciona la forma en la que editan a Fernando Pessoa; por otro lado tenemos la edición de Sobral Cunha que presenta una edición cronológica de los fragmentos y una interpretación semántica del texto no exenta de polémica [1 ]; y por último tenemos la edición de Pizarro (2010) que presenta una ordenación cronológica y una interpretación del texto que visa dar la mayor calidad de información posible para que el lector, siguiendo su criterio, opte por las variables textuales que crea convenientes. Hay quien sostiene, opinión que no comparto, que el rigor filológico crea un laberinto de notas y especificaciones que el lector no necesita, es decir, que la función de editor condiciona la de crítico. Veamos qué opina Pizarro:
“… lo que a mí me ha interesado es reiterar un principio fundamental de la crítica textual: el editor no debe hacer enmiendas o alteraciones en silencio. Para mí la cuestión no es de cantidad (ofrecer mucha o poca información) sino de transparencia: quien trabaja un archivo ajeno y contrafirma obras ajenas (que a veces el autor no sabía cómo organizar o ni siquiera había concebido como “obras”), debe declarar cómo se fraguó ese conjunto (“obras”) y cada uno de los elementos (“volúmenes”) en los que activamente participó.” (Giménez, 2013b)
Por lo que se refiere a la fijación del texto de una obra crítico-genética, este punto no suscita mucho debate. Cuanta más información, mejor. Por lo que se refiere a la ordenación de dichos fragmentos el debate sí es presente y pone sobre la mesa una serie de cuestiones de orden teórico. Aquello que se critica de la edición de 2010 es la falta de unidad del conjunto de fragmentos y la forma en que estos deben interpretarse como unidades y como partes de un todo. En este punto, la cuestión es, por un lado, dilucidar si hay o no, y en qué grado, una interdependencia semántica entre el todo y las partes. Por otro lado, saber qué base teórica justifica dicha relación semántica o su carencia. En el caso de la edición de 2010, para Pizarro se trata de transparencia [2 ]. Desde el punto de vista académico, la edición de 2010 es imprescindible para conocer la génesis del libro que Pessoa no publicó. La de 2013, ¿pierde transparencia al presentarse en forma de edición vulgata? Intentaremos responder más adelante.
Osvaldo Silvestre afirmó en la Universidad de Coimbra, en una comunicación llamada ‘O que nos Ensinam os Novos Meios sobre o Livro do Desassossego’ que la fórmula que mejor resume el periplo editorial de Pessoa, desde 1982 a día de hoy, es ‘Pessoa=Arca=Arquivo=Digital’ [3 ] (Silvestre, 2013). Así, la edición de 2010, para Silvestre, se asemeja más al catálogo de un archivo que consta con un rigor filológico excelente pero que adolece de la falta de una ordenación que atienda mejor a los deseos del propio Pessoa que, si bien ideó varios proyectos de libro, como constata Sepúlveda (2013), nunca terminó de editarlo. Como es bien sabido, Pessoa ensayó algunos prefacios [4 ] con los que inician la obra el resto de las ediciones, aun siendo cronológicamente posterior a la escritura de los primeros fragmentos. Precisamente este es uno de los cambios que Pizarro incluye en la edición de 2013 y que dan sentido a las palabras con las que habríamos la reseña sobre la construcción social del Livro do Desassossego que, en la forma de libro impreso, es una de las múltiples manifestaciones que los fragmentos pueden adoptar y que se nutre de diferentes procesos entre los cuales está la recepción de cada obra. Como remarcó Pizarro en la Universidad de Coimbra (2013), tras citar el trabajo de Manuel Portela [5 ], no hay una solución definitiva para el Desassossego pessoano. Este nuevo rostro consta de 445 fragmentos más 10 anexos. Mantiene los mismos fragmentos que la edición de 2010 pero reduce considerablemente el número de anexos que era de 141, con lo que no se perciben cambios radicales entre una edición y otra salvo la reordenación mencionada.
Hecha esta pequeña introducción entre ambas, veamos de forma gráfica algunas de las diferencias para entrar un poco más en detalle sobre la nueva publicación.
Es interesante comprobar como el espacio vacío que deja Pizarro en la edición de 2013 le sirve para representar tanto la cronología de la escritura de Fernando Pessoa como el carácter combinatorio de este puzle cuya reordenación pone de manifiesto. En este punto resulta pertinente recordar las tesis de Johanna Drucker sobre como los elementos gráficos son susceptibles de crear significado (Drucker, 2006). Las dos ediciones parecen libros completamente distintos por estar editadas en soportes diferentes y con elementos gráficos particulares, pero por lo que se refiere al núcleo del texto, ambas constan de los mismos fragmentos y en la misma secuenciación. Otras de las diferencias que notamos es que la referencia al número del fragmento está asignada al margen de la página de manera que se asiste a otra experiencia de lectura con una mayor conexión entre los diferentes párrafos que componen los fragmentos. Las cotas que identifican a los fragmentos desparecen del texto para ser situadas en las notas críticas hacia el final del libro junto con las referencias al soporte material del testimonio y las variables textuales (substituciones, eliminaciones, cambios, dudas, subrayados, etc.). Desaparecen las referencias a la marca ‘LdoD’ que constaban en más de 390 fragmentos. Sí que se mantienen las referencias a los títulos de los fragmentos asignados por el propio Pessoa. La obra sigue manteniendo el orden cronológico de los textos con la salvedad de los fragmentos que son situados al principio del libro a modo de presentación. Así, por ejemplo, leemos en la página 37:
Este libro é a autobiographia de quem nunca existiu.
De V[icente] G[uedes] não se sabe nem quem era, nem o que fazia, nem (...)
Este livro não é d’elle: é elle. (Pizarro, 2013: 37)
La elección de este fragmento en esta recensión no es casual. Uno de los puntos a favor que tiene la ordenación cronológica de los fragmentos es poner de manifiesto la dificultad de teorización que implica el estatuto autoral de la obra y, en este caso, marcar los momentos semánticamente diferenciados entre la primera etapa del libro, asociada a Vicente Guedes y la segunda, asociada a Bernardo Soares. Dicha dificultad sostiene asimismo la tesis de Sepúlveda según la cual cada proyecto heteronímico va asociada a un libro (Sepúlveda, 2012). Por otro lado, también sostiene la tesis que afirma que la máscara heteronímica es un producto del proceso de escritura, no un punto de partida (Giménez, 2012). Pizarro, al hilo de esta discusión, sostiene que para Pessoa, “a constução de um autor depende, em parte, da invenção de uma psicologia e de um estilo” (Pizarro, 2013: 15). Por eso afirma que en esta obra se pueden distinguir por lo menos tres autores a la búsqueda de un libro [6 ]. La nueva edición de Pizarro configura, de esta manera, un libro en el que la cronología de la escritura respeta las diferentes fases de estilo y de asignación autoral. La edición sigue, por lo que se refiere a la ordenación de fragmentos, la misma secuencia que la de 2010 con la salvedad de los prefacios, como ya dimos cuenta. La edición crítico-genética sirve de complemento a esta edición vulgata que resulta más agradable de leer al lector común. Este Desassossego viene a sumar una estrella a la constelación de ediciones de la galaxia pessoana y demuestra la maleabilidad de la base fragmentaria que adquiere un rostro diferente con cada publicación. Unas se justifican por unos criterios y otras por otros. Para concluir podemos decir que lo que Pizarro afirmó sobre la imposibilidad de defender una edición por encima de otra puede ser cuestionable, pero lo que no admite dudas es que la historia del Livro do Desassossego no se puede entender sin el trabajo de edición e interpretación de Jerónimo Pizarro.
Referencias
DRUCKER, Johanna (2006). “Graphical Readings and the Visual Aesthetics of Textuality”, Text, vol. 16: 267-276.
GIMÉNEZ, Diego (2012). “Fernando Pessoa y las máscaras escritas”, en Pessoa Plural, Nº 2: 155-173.
____ (2013a). “Fragmentación y Edición en el Libro del Desasosiego”. En MATLIT, 1.1: 57-73. Disponible en: http://iduc.uc.pt/index.php/matlit/article/view/1613
____ (2013b). “Jerónimo Pizarro: “Es muy difícil vivir en medio de la incertidumbre”, en Revista de Letras (21/08/13). Disponible en: http://revistadeletras.net/jeronimo-pizarro-es-muy-dificil-vivir-en-medio-de-la-incertidumbre/
PESSOA, Fernando (2010). Livro do Desasocego. Edición de Jerónimo Pizarro. Lisboa: Imprensa Nacional-Casa da Moeda. 2 tomos. Edición Crítica de Fernando Pessoa, serie mayor, vol. XII.
_____ (1982). Livro do Desassossego. Edición de Jacinto do Prado Coelho, Maria Aliete Galhoz y Teresa Sobral Cunha. Lisboa: Ática.
_____ (2008). Livro do Desassossego. Edición de Teresa Sobral Cunha. Lisboa: Relógio d’Água.
_____ (2012). Livro do Desassossego. Edición de Richard Zenith. Lisboa: Assírio & Alvim.
_____ (2013). Livro do Desassossego. Edición de Jerónimo Pizarro. Lisboa: Tinta-da-china.
PIZARRO, Jerónimo (2013). ‘A Ansiedade da Unidade: Uma Teoria da Edição’. Conferencia pronunciada el 5 de diciembre de 2013 en la Facultad de Letras de la Universidad de Coimbra. Trecho disponible en: http://projetoldod.com/2013/12/09/jeronimo-pizarro-a-ansiedade-da-unidade-uma-teoria-da-edicao/
PORTELA, Manuel (2013). 'Nenhum Problema Tem Solução: Um Arquivo Digital do Livro do Desassossego’. MATLIT, 1.1: 9-33. Disponible en: http://iduc.uc.pt/index.php/matlit/article/view/1618
SEPÚLVEDA, Pedro (2012). Os Livros de Fernando Pessoa. Tesis-doctoral. Lisboa: Faculdade de Ciências Sociais e Humanas da Universidade Nova de Lisboa. URL: http://hdl.handle.net/10362/7420
SEPÚLVEDA, Pedro (2013). ‘Listas do Desassossego’. MATLIT, 1.1: 35-55. Disponible en: http://iduc.uc.pt/index.php/matlit/article/view/1616
SILVESTRE, Osvaldo (2013). ‘O que Nos Ensinam os Novos Meios sobre o Livro do Desassossego’. Conferencia pronunciada el 21 de marzo de 2013 en la Facultad de Letras de la Universidad de Coimbra. Trecho disponible en: http://projetoldod.com/2013/10/20/osvaldo-manuel-silvestre-o-que-nos-ensinam-os-novos-meios-sobre-o-livro-no-livro-do-desassossego/
[1 ] La edición de Sobral Cunha (2008) se caracteriza por presentar un papel muy ‘activo’ de la editora que muchas veces reordena la lógica interna de los fragmentos modificando párrafos tras seguir una exégesis semántica del trecho en cuestión.
[2 ] Un buen ejemplo de la importancia de la transparencia a la que alude Pizarro la encontramos en la introducción de la edición de 2013 donde se hace habla de las ‘no erratas’, esos lapsus gramaticales que el autor intencionadamente colocó en el texto.
[3 ] Según Silvestre, el Livro do Desassossego, en su historia, se puede explicar, además de la asociación por décadas a las diferentes ediciones, a los conceptos expresados en la fórmula citada, a saber, ‘Pessoa=Arca=Archivo=Digital’. La obra del escritor se fue construyendo, primero, a través del descubrimiento del legado de Pessoa en el ‘Arca’, y que se manifestaría en la primera edición del libro de Coelho. El segundo momento sería el del ‘Archivo’ que se caracterizaría en la sucesiva catalogación e interpretación de los documentos gracias a la labor investigadora concretizadas en las ediciones de Sobral Cunha y de Zenith y cuya máxima expresión sería la edición de Pizarro, como un detallado catálogo del archivo. El último momento vendría vehiculado por la representación ‘Digital’ de dicho archivo.
[4 ] BNP/E3, 6-1r y 2r; BNP/E3, 6-3r; BNP/E3, 5-32r; BNP/E3, 7-21 e 22r; BNP/E3, 8-3.
[5 ] Precisamente, uno de los puntos que sostiene Manuel Portela (2013), al construir el Arquivo Digital Colaborativo do Livro do Desassossego, es remarcar como éste puede tomar la forma de una edición o recorrido a partir de las lecturas y de las interpretaciones de cada uno de los lecto-usuarios de dicho archivo. Cada edición es una posible ordenación.
[6 ] Si tenemos en cuenta la tesis de Eduardo Lourenço que considera el Livro do Desassossego un texto suicida porque contiene los estilos heteronímcos más representativos, no sé si, entonces, sería más justo decir que el libro podría tener más de un autor sobre los que Guedes, Soares y el propio Pessoa se sitúan como guardadores de dicho rebaño heteronímico.